Después de la reunión del Bureau de la FINA (Federación Internacional de Natación) realzada en Dubai, mediante una nota publicada en su web, ha redactado los términos respecto de la homologación de los bañadores.
La FINA recuerda que su deseo es mantener la natación como un deporte en lo que destaca en su esencia es el rendimiento físico del nadador por lo que las normas van dirigidas a proteger este objetivo y a garantizar las condiciones en todo el mundo para una competición igualitaria.
Recuerda que para conseguirlo, ha tenido en cuenta la opinión de todos los fabricantes de bañadores, además de la comunidad de nadadores y entrenadores para establecer las reglas que a partir de ahora se aplicarán en la homologación de bañadores, aunque los términos exactos están en manos de personal técnico que someterán a las prendas presentadas a un examen objetivo.
Por todo ello, la FINA aprueba la normativa de la obligatoriedad de pasar de nuevo a todos los bañadores por el proceso de homologación con las condiciones que se desprendieron en la reunión del 20 de febrero en Laussane con las siguientes enmiendas:
El bañador no podrá extenderse hacia el cuello, no podrá sobrepasar los hombros ni los tobillos. Es decir, estarán prohibidos los bañadores con mangas. En su utilización, el bañador deberá ceñirse a la forma del cuerpo, por lo que se prohíben estructuras que puedan lograr ventajas hidrodinámicas.
La utilización de diferentes materiales no podrá producir burbujas de aire. El material utilizado no podrá tener más de 1 milímetro de espesor, según el método de medida establecido en el estándar ISO 5058 para materiales textiles.
El efecto de flotabilidad será de un máximo de 100 gramos (1 Newton). Este efecto deberá ser en cualquier talla del bañador. Solo se homologarán los records del mundo que se consigan con un bañador homologado.
A partir del 1 de enero de 2010 entrará en vigor una nueva norma sobre la permeabilidad del material utilizado para la construcción del bañador: Los tejidos no permeables solo podrán utilizarse en el 50% del total del tejido utilizado en el bañador para bañadores completos., 25% para la parte superior del cuerpo y 25% para la parte inferior. Las zonas no permeables deberán distinguirse claramente del resto.
Para las normas que entrarán en vigor a partir del 1 de enero de 20010 será necesario que los fabricantes homologuen sus bañadores como máximo el próximo 1 de noviembre y a partir de esa fecha lo hagan antes del 1 de agosto de cada año y los comercialicen antes de 6 meses a la celebración de un Campeonato del Mundo o de unos Juegos Olímpicos.
La FINA publicará cada año la lista de modelos aprobados.
Esto significa que el 31 de marzo, dentro de dos semanas, los bañadores que puedan utilizarse en competiciones oficiales de la presente temporada deberán haber pasado por dicha homologación y el 1 de noviembre de 2009 deberán aprobarse los que se utilicen en 2010.
De momento, nada claro en el horizonte puesto que deberemos esperar a la publicación por parte de la FINA de los modelos que aprobará.
Roger Torné